Aprovechando unos días de vacaciones que aún me quedaban del
fatídico año 2013, este lunes he aprovechado a ejercitarme con la bicicleta
para tratar de sacar mi cuerpo mas allá de los límites geográficos por los que
suelo entrenarme. Como ya he dicho en varias ocasiones, son estas salidas
corriendo o en bici, momentos en los que suelen venir a mi multitud de cosas de
las que luego suelo plasmar por aquí, bien sean de pensamientos internos o de
denuncia.
El caso es que hace un mes hice la misma ruta que esta
semana. Esto es, ir desde mi casa hasta El Escorial por el llamado camino de
las siete puertas y volver por el camino del camping para luego desviarme por
Los Negrales dirección Alpedrete y volver a casa.
En aquella ocasión llegue muy justito de fuerzas por lo que
quisiera que fuese. Bueno, sinceramente estoy en un estado de forma muy lejano
a lo que estaba tiempo atrás. Y en un punto del camino me pareció ver algo
extraño, pero no me di la vuelta para poder comprobarlo debido a la fatiga que
llevaba acumulada.
El caso es que al llegar a casa descubrí la noticia del futuro plan de asfaltado que iba a desarrollarse en Collado Villalba y entonces
volví a caer en la cuenta de lo que había visto, aunque no estaba en
circunstancias de poder poner la mano en el fuego asegurando nada, pues desde
la bici uno ve las cosas demasiado rápido.
Así, en la salida de este lunes, pude comprobar que junto a
la falta de varios adoquines en Batalla de Bailen a la altura de la Malvaloca,
existen otros puntos de importante tráfico en el municipio sobre los que
conviene actuar.
Si recuerdan, hace poco más o menos un año, el ejecutivo se
sacó de la manga la historia de las ITV (Inspección Técnica de Viviendas) para
inmuebles de más de 30 años. Esta medida puede ser buena siempre y cuando sea
una medida para vigilar que no suceda algo como lo de Maestro Serrano y no una simple medida recaudatoria.
Pero me pregunto yo, ¿hace lo mismo el Ayuntamiento con sus
bienes? ¿Es de recibo el estado en el que se encuentra el puente de Los
Negrales por poner un ejemplo? No sé si dicho puente es de competencia
municipal o del Ministerio de Fomento, pero el que este con el firme
literalmente hundido y que en algunos lugares los desconchones del asfalto nos
enseñen hasta su tercera capa de asfalto mas interna, hace que como poco
dudemos de su seguridad.
¿Y todo este rollo de la bici a santo de qué ha salido? Pues
a santo de que este lunes si volví sobre mis pasos y si pude certificar lo que
mis incrédulos ojos creían haber visto pero mi cabeza trató de omitir
haciéndole creer que era una visión. Si señores, un hierro del forjado asoma
entre el débil asfalto de dicho puente.
¿Estamos seguros? ¿Podemos seguir invirtiendo en cosas
accesorias cuando se nos viene la casa encima?