Siempre me ha gustado el ciclismo pese a que desde aquí he criticado los excesos de nuestro ayuntamiento, especialmente con la Clásica de Alcobendas, pero eso no quita para que uno abandone por un día la comodidad del sillón y se asome a las rampas del cercano puerto por el que pase un espectáculo como La Vuelta. En este caso, el turno fue para la subida de Navacerrada a pesar de que el mal tiempo nos impidiese gozar de un buen día de campo y espectáculo ciclista.
Para todos aquellos que dicen que el ciclismo ya no es lo que era, simplemente ver las caras demacradas por el frío y el ver como buscaban en la cima esos pocos periódicos que algunos aficionados tenían, devolvía la épica al ciclismo, algo que es la esencia de este deporte.
Os dejo un carrusel de imágenes del día, perdón por su baja calidad.
martes, 22 de septiembre de 2009
jueves, 17 de septiembre de 2009
Se repite la historia
Llevaba un tiempo alejado de los artículos “cañeros” en mi blog en contra del equipo de gobierno local y de sus actuaciones, sin embargo el pasado lunes pude leer un articulo editorial de “La Voz de la Sierra” y no he podido reprimirme mas ante el articulo del señor Luis de la Calle.
Se trataba de un artículo relativo a las obras de la Calle Real y como no se podía esperar de otra forma, este artículo iba en clara defensa del equipo de gobierno.
Uno no es periodista y hace esto por afición y por amor a su pueblo y evidentemente este articulo no estará tan bien redactado como el del director del periódico, pero a cambio no tendrá ningún servilismo ni pago pendiente hacia nadie, por lo que voy a tratar de ser lo mas objetivo posible, algo que creo que no lo ha sido el señor que nos amenizaba las noches desde Canal7 y que ahora lo hace desde Canal8 Sierra.
Para empezar, diremos que es cierto que la Calle Real llevaba mucho tiempo sin ningún tipo de obra ni mejora mas allá de cambiar algunos bancos toques de pintura a la valla del río, etc. y que todos los peatones en los días de lluvia hemos renegado de esas baldosas huecas que han conseguido empaparnos los pies. Es por ello que creo la reforma era en cierto modo necesaria, como también lo pensaba de la de Honorio Lozano hasta que vi el proyecto.
En el artículo de la Voz de la Sierra, se atacaba duramente que haya gente que no comprenda que todas las obras generan molestias y que incluso algunos hayan llegado a comparar la Calle Real con las ruinas de Sarajevo. Desde luego la comparación no es afortunada ni mucho menos, pero tampoco se nos puede censurar a quienes queramos alzar una voz crítica al respecto. Y es que lo que el columnista no puede obviar, es que las obras de Honorio Lozano están demasiado cerca en el tiempo y la gente conserva en la memoria su desarrollo y tantas medias verdades y mentiras como se nos contaron entonces y se nos empiezan a contar ahora.
Si volvemos la vista atrás, recordaremos que la oferta de Cover en la obra de Honorio Lozano salio ganadora por ser la que se desarrollaba en un menor espacio de tiempo, cosa que no sucedió así y que además según se iba prolongando nos iba saliendo más cara. Por ello, cuando nos dicen que esta obra se esta desarrollando conforme a los plazos previstos, pero transcurridos dos meses desde el inicio y a falta de tres para su supuesta finalización solo hay signos de unas zanjas que parecen haberse hecho sin coordinación, nos resulta casi imposible creer al señor concejal de urbanismo.
Cualquiera que pase por la famosa calle puede observar como hay muchos tramos en los que aún no han comenzado los trabajos y que en los lugares donde lo han hecho, a nivel de superficie lo único que se puede ver es algún bordillo y un escarbado alrededor de los árboles que los ha dejado con las raíces al aire, lo que ha provocado que muchos de ellos estén muertos o en estado terminal, repitiéndose historias ya vividas. Y para ver eso señor Luis, solamente hay que darse un paseo rápido por la calle y tratar de contar cuantos operarios hay trabajando en la obra. Sin ir mas lejos, hoy había un único operario para hacer una arqueta debido a lo cual el acceso al “barrio vaticano” desde la Calle Real estaba cortado.
Se dijo que la calle no vería nunca cerrada la circulación rodada, sin embargo “un imprevisto” obligo a cortarla durante tres semanas, una mas incluso de las previstas en principio. A todo esto, el imprevisto no sabemos si viene nuevamente motivado de un estudio técnico anterior deficiente o demasiado simple.
Y para terminar, no le debería de extrañar al señor redactor que los comerciantes estén con algo mas que la mosca detrás de la oreja y que algunos no esperen a ver el resultado final de las obras para alzar su voz y es que visto lo que venden como espejo del mismo (esto es, una reforma en la línea de Honorio Lozano) no puede ser jamás de su agrado. Esta claro que el comercio de la zona ha quedado herido casi de muerte, sobretodo en una de sus aceras, donde los pocos peatones que pasan por la misma, lo hacen a una distancia de unos diez metros con respecto de los escaparates e incluso a distinta altura con el obstáculo añadido de una barandilla, lo que hace imposible llamar la atención de los potenciales clientes.
Por todo ello, me parece que el director del citado periódico, aún en el ejercicio de la libertad de prensa, ha osado demasiado haciendo un análisis tan sesgado de la obra de la Calle Real. El tiempo pondrá las cosas en su sitio, pero haría bien el señor director en taparse un poco mas, que dentro de poco llegará el invierno y con tanta corriente el quedarse desprotegido y a la intemperie le puede hacer cogerse un resfriado.
Se trataba de un artículo relativo a las obras de la Calle Real y como no se podía esperar de otra forma, este artículo iba en clara defensa del equipo de gobierno.
Uno no es periodista y hace esto por afición y por amor a su pueblo y evidentemente este articulo no estará tan bien redactado como el del director del periódico, pero a cambio no tendrá ningún servilismo ni pago pendiente hacia nadie, por lo que voy a tratar de ser lo mas objetivo posible, algo que creo que no lo ha sido el señor que nos amenizaba las noches desde Canal7 y que ahora lo hace desde Canal8 Sierra.
Para empezar, diremos que es cierto que la Calle Real llevaba mucho tiempo sin ningún tipo de obra ni mejora mas allá de cambiar algunos bancos toques de pintura a la valla del río, etc. y que todos los peatones en los días de lluvia hemos renegado de esas baldosas huecas que han conseguido empaparnos los pies. Es por ello que creo la reforma era en cierto modo necesaria, como también lo pensaba de la de Honorio Lozano hasta que vi el proyecto.
En el artículo de la Voz de la Sierra, se atacaba duramente que haya gente que no comprenda que todas las obras generan molestias y que incluso algunos hayan llegado a comparar la Calle Real con las ruinas de Sarajevo. Desde luego la comparación no es afortunada ni mucho menos, pero tampoco se nos puede censurar a quienes queramos alzar una voz crítica al respecto. Y es que lo que el columnista no puede obviar, es que las obras de Honorio Lozano están demasiado cerca en el tiempo y la gente conserva en la memoria su desarrollo y tantas medias verdades y mentiras como se nos contaron entonces y se nos empiezan a contar ahora.
Si volvemos la vista atrás, recordaremos que la oferta de Cover en la obra de Honorio Lozano salio ganadora por ser la que se desarrollaba en un menor espacio de tiempo, cosa que no sucedió así y que además según se iba prolongando nos iba saliendo más cara. Por ello, cuando nos dicen que esta obra se esta desarrollando conforme a los plazos previstos, pero transcurridos dos meses desde el inicio y a falta de tres para su supuesta finalización solo hay signos de unas zanjas que parecen haberse hecho sin coordinación, nos resulta casi imposible creer al señor concejal de urbanismo.
Cualquiera que pase por la famosa calle puede observar como hay muchos tramos en los que aún no han comenzado los trabajos y que en los lugares donde lo han hecho, a nivel de superficie lo único que se puede ver es algún bordillo y un escarbado alrededor de los árboles que los ha dejado con las raíces al aire, lo que ha provocado que muchos de ellos estén muertos o en estado terminal, repitiéndose historias ya vividas. Y para ver eso señor Luis, solamente hay que darse un paseo rápido por la calle y tratar de contar cuantos operarios hay trabajando en la obra. Sin ir mas lejos, hoy había un único operario para hacer una arqueta debido a lo cual el acceso al “barrio vaticano” desde la Calle Real estaba cortado.
Se dijo que la calle no vería nunca cerrada la circulación rodada, sin embargo “un imprevisto” obligo a cortarla durante tres semanas, una mas incluso de las previstas en principio. A todo esto, el imprevisto no sabemos si viene nuevamente motivado de un estudio técnico anterior deficiente o demasiado simple.
Y para terminar, no le debería de extrañar al señor redactor que los comerciantes estén con algo mas que la mosca detrás de la oreja y que algunos no esperen a ver el resultado final de las obras para alzar su voz y es que visto lo que venden como espejo del mismo (esto es, una reforma en la línea de Honorio Lozano) no puede ser jamás de su agrado. Esta claro que el comercio de la zona ha quedado herido casi de muerte, sobretodo en una de sus aceras, donde los pocos peatones que pasan por la misma, lo hacen a una distancia de unos diez metros con respecto de los escaparates e incluso a distinta altura con el obstáculo añadido de una barandilla, lo que hace imposible llamar la atención de los potenciales clientes.
Por todo ello, me parece que el director del citado periódico, aún en el ejercicio de la libertad de prensa, ha osado demasiado haciendo un análisis tan sesgado de la obra de la Calle Real. El tiempo pondrá las cosas en su sitio, pero haría bien el señor director en taparse un poco mas, que dentro de poco llegará el invierno y con tanta corriente el quedarse desprotegido y a la intemperie le puede hacer cogerse un resfriado.
martes, 8 de septiembre de 2009
Una buena razón para ser Holandes
El pasado sábado 29 de agosto comenzó una nueva edición de La Vuelta Ciclista a España. La principal novedad de esta edición, por cierto la mas espectacular y dura que recuerdo, ha estado en su punto de partida, Holanda.
Muchas han sido las voces que se han escuchado argumentando que si dejaba de ser la Vuelta a España (recordemos que en otros años se ha tocado Portugal, Francia y con bastante frecuencia Andorra), que si para que irse hasta allí, etc. Pero lo cierto es que una vez realizado el periplo por Holanda, Alemania y Bélgica el resultado ha sido espectacular. Por un lado, la organización ha conseguido embolsarse unos buenos euros y dar una repercusión internacional a la prueba que no tenía a pesar de la excelente nomina de corredores participantes que presenta la edición de este año. Por otro, los países del Benelux se han volcado con la prueba como si se tratase de una de sus clásicas de primavera en las que se ve el ciclismo más espectacular como Paris – Roubaix, Lieja, Amstel Gold Race…
La verdad es que uno ha sentido envidia viendo como las cunetas se llenaban de aficionados para ver una carrera que en cierto modo les es ajena. Pero claro, existe una gran diferencia entre Holanda y Bélgica con respecto a España, la cultura de la bici. Allí la bicicleta es algo mas que un deporte o un hobby, sin ir mas lejos, en Holanda el parque de bicis es mayor que el número de habitantes y en Bélgica hay tramos de carretera que conservan su adoquinado de hace décadas para que se puedan seguir celebrando esas carreras que llevan cada año a miles de cicloturistas a emular a sus ídolos.
Todo esto esta muy lejos de la cruda realidad que se vive en España y más concretamente en nuestro pueblo, donde el asfalto y el hormigón no deja de ganar terreno al campo y en las reformas de los pueblos no se tiene en cuenta el uso de un transporte tan limpio y saludable como la bicicleta. No paran de bombardearnos con campañas de reciclaje de vidrio, uso moderado de bolsas, etc., pero las instituciones públicas son las primeras que entre el bolsillo y el medio ambiente siempre dan prioridad a lo primero.
Por ello la iniciativa de la III Marcha Cicloturista en Defensa del Carril Bici propuesto en el PGOU de Collado Villalba, organizada por BiciSierra para este próximo domingo tiene que ser una manifestación festiva en defensa de un modo de vida y una cultura más saludable. Quién sabe si tal vez pequeños pasos como este ayuden a no ver espectáculos tan bochornosos como los vividos en Pozuelo este fin de semana. Recuerden la convocatoria, domingo día 13 a las 12:00 en la Biblioteca Miguel Hernández.
Muchas han sido las voces que se han escuchado argumentando que si dejaba de ser la Vuelta a España (recordemos que en otros años se ha tocado Portugal, Francia y con bastante frecuencia Andorra), que si para que irse hasta allí, etc. Pero lo cierto es que una vez realizado el periplo por Holanda, Alemania y Bélgica el resultado ha sido espectacular. Por un lado, la organización ha conseguido embolsarse unos buenos euros y dar una repercusión internacional a la prueba que no tenía a pesar de la excelente nomina de corredores participantes que presenta la edición de este año. Por otro, los países del Benelux se han volcado con la prueba como si se tratase de una de sus clásicas de primavera en las que se ve el ciclismo más espectacular como Paris – Roubaix, Lieja, Amstel Gold Race…
La verdad es que uno ha sentido envidia viendo como las cunetas se llenaban de aficionados para ver una carrera que en cierto modo les es ajena. Pero claro, existe una gran diferencia entre Holanda y Bélgica con respecto a España, la cultura de la bici. Allí la bicicleta es algo mas que un deporte o un hobby, sin ir mas lejos, en Holanda el parque de bicis es mayor que el número de habitantes y en Bélgica hay tramos de carretera que conservan su adoquinado de hace décadas para que se puedan seguir celebrando esas carreras que llevan cada año a miles de cicloturistas a emular a sus ídolos.
Todo esto esta muy lejos de la cruda realidad que se vive en España y más concretamente en nuestro pueblo, donde el asfalto y el hormigón no deja de ganar terreno al campo y en las reformas de los pueblos no se tiene en cuenta el uso de un transporte tan limpio y saludable como la bicicleta. No paran de bombardearnos con campañas de reciclaje de vidrio, uso moderado de bolsas, etc., pero las instituciones públicas son las primeras que entre el bolsillo y el medio ambiente siempre dan prioridad a lo primero.
Por ello la iniciativa de la III Marcha Cicloturista en Defensa del Carril Bici propuesto en el PGOU de Collado Villalba, organizada por BiciSierra para este próximo domingo tiene que ser una manifestación festiva en defensa de un modo de vida y una cultura más saludable. Quién sabe si tal vez pequeños pasos como este ayuden a no ver espectáculos tan bochornosos como los vividos en Pozuelo este fin de semana. Recuerden la convocatoria, domingo día 13 a las 12:00 en la Biblioteca Miguel Hernández.
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