jueves, 14 de enero de 2021

El paso de Filomena II. Bloqueo y asueto

Foto cortesía de J.M. Simón
Dejábamos la anterior entrada en la noche del viernes al sábado, en el momento donde la nevada era más intensa y donde nos quedaban al menos otras 18h de descarga continua. Los operarios del plan de inclemencias invernales seguían trabajando, aunque en ya con la fatiga acumulada de dos días muy intensos de trabajo y me imagino que con la frustración de ver que tu trabajo queda anulado al poco tiempo por la continua nevada.

Nos plantamos en el sábado y aunque muchos no lo crean, el que una ciudad o un municipio como Collado Villalba o no digamos nada la capital, se despierte cada mañana con sus servicios operativos, implica que el despertador suena a muy temprana hora para una gran cantidad de gente entre la cual me encuentro.

Me acosté con las carreteras bloqueadas y el servicio de cercanías suspendido. Levantar la persiana y ver la calle totalmente nevada y como seguía cayendo, hacia abortar la opción de transporte por carretera de inmediato, así que quedaba saber si el ferrocarril volvía a funcionar.

Mi experiencia de más de 30 años cogiendo el tren casi de forma ininterrumpida, me hace sospechar que no vamos a tener servicio al menos en las primeras horas del día, pues lo más seguro es que los cambios estén helados o inhabilitados por la acumulación de nieve y todo ello pensando siempre en que las catenarias hayan aguantado el peso de la nieve. De producirse alguna avería la cosa se complicaría, pues trabajar en las condiciones del sábado para tratar de arreglarla sería realmente una odisea y un gran peligro para los trabajadores. A todo esto, sumemos que fueron unos cuantos los maquinistas que se vieron atrapados en carretera cuando iban a trabajar y los que llegaron con retraso a sus trenes que, aunque pudiesen estar en la cabecera de línea, no tenían quien los llevase a su destino

Ante tal perspectiva, en la noche del viernes me descargue las aplicaciones de ADIF y Renfe Cercanías. Me puse a trastear, pero la información que daban no era fiable en absoluto. No me podía creer que diesen que salían los trenes con normalidad ¿habían conseguido solucionar el problema durante la noche con la que estaba cayendo?

Por si acaso, decido llamar a la Policía Municipal, pues entiendo que estarán trabajando a tope por todo el pueblo y que tienen que estar puestos al corriente de cómo se encuentran los enclaves críticos del mismo. Sin embargo, a pesar de que contestan la llamada, la respuesta es que ellos tienen la misma información que yo. He de reconocer que la respuesta me defraudó enormemente y que por mi cabeza pasó la afirmación que mucha gente ha venido haciendo con el gremio de un tiempo a esta parte, “están demasiado cómodos en esa comisaría”. No pedía que me abriesen camino ni nada por el estilo, simplemente una información básica que creo deberían tener en ese momento.

Así que pocas opciones tenía.

  • Declararme “insumiso laboral”
  • Lanzarme como un kamikaze en busca del tren fantasma
  • Esperar a contactar con alguien que me confirmase desde zona cero, si el servicio se había restablecido.

Finalmente, la tercera opción fue la elegida. Fueron varios los mensajes de WhatsApp que nos intercambiamos entre distintos compañeros que estábamos en situaciones similares. A algunos ya les había echado el alto la policía en su municipio y les mando de vuelta a casa, mientras otros habían alcanzado la estación de Renfe de su pueblo ayudados por Protección Civil. Fue precisamente este compañero el que me anunció que el servicio estaba suspendido y sin visos de recuperarse, cosa que se fue confirmando por otros cuantos después, hasta que pasado un largo tiempo, las altas instancias de la empresa nos dijeron que definitivamente no se podía hacer nada y no se trabajaría durante el sábado. Al mismo tiempo se me informaba de que varios compañeros corrieron peor suerte y tuvieron que hacer noche en el trabajo y esperar a que el temporal remitiese para poder volver a sus hogares.

Así que poco más se podía hacer, más que tratar de prolongar el sueño unas necesarias horas más, para después levantarse con un buen desayuno y disfrutar de la bella estampa que la nevada nos obsequió y quién sabe si hasta hacer algún muñeco de nieve.

Foto cortesía de Denniza Nicolova
Con casi toda la actividad empresarial y comercial parada, la nevada había pasado a ser un fenómeno histórico del que mayores y pequeños querían disfrutar y así pudimos ver a muchos haciendo travesía con sus bastones como si estuviesen en el Valle de la Barranca, incluso algunos con esquís. Otros paseaban a sus pequeños con trineos o hacían batallas campales de nieve. Pero sin duda alguna, las estrellas fueron los muñecos de nieve que inundaron las redes sociales, algunos de ellos de gran calidad como el que hizo Luis Herrero en la Plaza de los Belgas recreando a Olaf, el personaje de Frozen. Lamentablemente no dispongo de imagen del mismo, pero seguro que muchos lo habréis visto.

La intensa nevada nos había regalado un día de fiesta.

Continuará…


martes, 12 de enero de 2021

El paso de Filomena (I)

Nos despedíamos del 2020 y algunos se las prometían muy felices con este 2021 que sin embargo ha empezado cañero. Covid disparado, El Capitolio de los EEUU sufriendo algo parecido a un golpe de estado y como guinda del pastel a los diez primeros días de este año, llega Filomena, la mayor nevada que uno recuerde en la zona y según las estadísticas, sin precedentes en los últimos 50 años.

Las predicciones meteorológicas fallaron en la primera parte de la semana, cuando ya se anunciaron algunas precipitaciones débiles en forma de nieve en los días previos y que no llegaron a producirse. Sin embargo, nos plantamos en el miércoles con el anuncio de una gran nevada confirmada. Empezaría el jueves con un aperitivo al que seguiría la gran nevada.

Llegue a ver noticias en las que se anunciaban tres escenarios:

  • El primero con precipitaciones entre los 5 y los 10cm
  • El segundo, ya más serio anunciaba precipitaciones de hasta cerca de 40cm
  • Y el tercero, al que clasificaron de apocalíptico, con espesores de más de 70cm

Así que todos estábamos más o menos informados de lo que se podía venir. A mi particularmente, lo que más me preocupaba era la predicción que daba casi 36h de nieve consecutivas (y porque el jueves no cuajó) y de una cierta intensidad. No iba a ser una nevada agresiva, pero sí de larga duración.

Así pues, a partir del viernes, todo fue sucediendo más o menos conforme al guion que nos planteaba la AEMET. Comenzando las nevadas en torno al mediodía e intensificándose conforme iba pasando la tarde hasta que empezó a cuajar al final de la misma y principios de la noche.

Fue a partir de las 20:00h cuando ya se vio que todo iba a ponerse feo. El servicio de Cercanías empezaba a estar contra las cuerdas y se anunciaba la cancelación del mismo a partir de las 22:00, algo que al final no sucedió y que habría dejado a miles de personas literalmente en la calle y sin posibilidad de volver a sus domicilios.

Por otro lado, las carreteras empezaban a tener ya muchos problemas, tanto por la nieve como por la falta de conocimiento e indisciplina de los conductores. Seguimos usando el carril izquierdo de las autovías y autopistas a pesar de que por los indicadores luminosos (en todos y cada uno de ellos) se nos indique que no lo hagamos. Ese carril tiene que quedar libre para facilitar que las quitanieves puedan pasar a abrir camino, de lo contrario las dejamos atrapadas y sin poder funcionar. Y eso es algo que deberíamos haber aprendido ya pues, aunque no haya nevadas de estas características de forma frecuente en la zona, si hemos tenido otras que ya han tenido idénticas consecuencias en este sentido.

El resto del desarrollo del paso de Filomena ya lo conocemos más o menos, así que vamos a pasar al análisis de lo sucedido en Collado Villalba.

El jueves y con la llegada del primer barrido de Filomena, el Plan de Inclemencias Invernales entró en acción esparciendo sal durante toda la jornada. Este plan según el Ayuntamiento, implica la actuación de cerca de 200 efectivos. Ojo, que se engloba en esta suma a Policía, Protección Civil, empleados de la brigada de mantenimiento y personal de las contratas de limpieza y jardines.

Así que si tenemos en cuenta que algunos de estos efectivos han tenido que seguir prestando sus cometidos habituales (aunque fuese de forma casi residual), que los servicios se han prestado durante las 24h del día durante varios días, lo que implica que aun estirando las jornadas entran en acción los preceptivos y necesarios descansos del personal, podríamos hablar de que en todo momento habría trabajado un abanico de entra 40-120 personas a lo sumo durante lo más crudo del temporal. Que la gente se borre de la cabeza la idea de 200 personas tirando sal a la puerta de su casa. Así que tomemos como referencia 80 personas y díganme cómo distribuirlas a lo largo de la geografía de nuestro municipio. Y eso que aquí nos vemos beneficiados de ser un pueblo pequeño. Imagínense cuando llegaran desde El Escorial a limpiar a Las Zorreras o desde Galapagar a El Pocillo.


Era imprescindible el priorizar las actuaciones sobre puntos estratégicos.

  • Salidas y entradas de la A6 y puentes de paso al centro.
  • Accesos a Hospital y centros de salud
  • Accesos a estaciones de autobuses y trenes
  • Calle Real, Honorio Lozano, Batalla de Bailen y Carretera de Moral para poder unir la zona de la estación con la del pueblo y evitar la incomunicación de este último.

Empiecen a repartir efectivos y verán que con esos puntos que son los más básicos empiezan a no cuadrar las cuentas y más cuando la intensidad de la nevada provocaba que el trabajo realizado se anulase en menos de una hora. Que la sal no borra la nieve, solo le hace más difícil que cuaje y que haga falta más cantidad para ello, pero Filomena venía sobrada. Además, cada cierto tiempo hay que ir a repostar sal y eso resta su buen tiempo.

Por eso no nos debe extrañar que el sábado y a pesar de los esfuerzos titánicos de unos cuantos trabajadores, el panorama fuese similar al de Toronto o Chicago. En esos momentos “comenzaba la fiesta” de la parte lúdica de la nieve para una gran mayoría de vecinos, pero los empleados del dispositivo ya llevaban en sus lomos dos jornadas maratonianas. Y eso los que han agarrado la pala estos días ya saben lo que significa y lo poco que cunde. Pero era sábado, la nieve estaba blandita y molaba hacer muñecos de nieve. Y seguía nevando…



Fotos cortesía de Jose María Simón y N.H.

Continuará…




martes, 29 de diciembre de 2020

Resumen 2020 IV (Octubre-Diciembre)

Y llega el momento de ir cerrando el recorrido por lo acontecido en este 2020 con lo publicado en el blog en los últimos tres meses.

Evidentemente, estos tres meses han venido marcados por las restricciones de movilidad, que sin llegar a ser tan exigentes como el confinamiento, si han trastocado mucho el día a día de los ciudadanos.

Y en mitad de todo esto, los Villalbinos hemos sufrido una “gestión de charlotada” del tema de las restricciones y demás medidas para paliar el contagio covid. Lo que pasa es que en este caso no tiene el monopolio del desastre el ayuntamiento, pues todas las instituciones, desde la primera a la última, han estado muy por debajo de lo requerido por la situación. ¿Se acuerdan de cuando empezaron las restricciones y nos tiramos una buena temporada especulando si nos “encerraban o no”? o ¿si se haría por comunidades autónomas, municipios o áreas básicas de salud?

Pero claro, todo quedo superado por el momento en el que se decidió hacer los cierres perimetrales por zonas básicas de salud, dando lugar a situaciones kafkianas en las que dos aceras de la misma calle tenían distinta situación. Si es que había que estudiar para saber lo que se podía hacer y lo que no, no fueran a pillarte en un “paso fronterizo” y te hubieses metido en un lío sin comerlo ni beberlo.

Y una de las consecuencias derivadas de los cierres perimetrales, toque de queda y demás restricciones, ha sido el ver como a la hostelería se le apretaba un poco más el nudo de la soga. Ya hemos visto algunos cierres destacados en estos meses como del Jarana, uno de los restaurantes más conocidos del municipio, aunque no terminase de despuntar.

Y ante esta nueva situación, algunos locales han decidido redoblar su apuesta por el delivery. Un mundo con muchas sombras, pero que a algunos les está suponiendo la tabla de salvación a la que aferrarse para evitar el desastre total. Desgraciadamente no todos tienen esa opción o no es fácilmente exportable para todos los negocios y de todo eso iba la entrada publicada en el mes de noviembre.

El mes de diciembre arrancó con la triste noticia de la muerte de Maradona que, aunque no pilló de sorpresa por la vida que llevaba el astro argentino, no dejó de ser sorprendente, pues uno se resiste a ver morir a los ídolos o mitos de la infancia. Y con la muerte de “El Pelusa” como marco, traté de retratar una pequeña parte de la vida de un niño de los ochenta.


Y empecé con la labor de ir resumiendo el año, pero desgraciadamente, un acontecimiento luctuoso sacudió el municipio, la muerte de Alfonso. Una muerte que no ha hecho más que poner de manifiesto el fracaso de la sociedad que no es capaz de acoger a la gente que por uno u otro motivo, se han visto fuera del sistema en algún momento.

Una vez abordado el asunto, ya me disponía a cerrar el mes y por consiguiente el fatídico 2020 con la publicación de los respectivos resúmenes de las partes II y III. Sin embargo, fue llegando la Navidad, y con ella temas de todos los años como el del alumbrado por estas fechas. Y es que este año no tenía previsto hablar del asunto, pero el escándalo ha llegado de la mano de las luces navideñas y del incremento desmesurado del presupuesto para las mismas con un servicio más que cuestionable.

Pero finalmente 2020 llega a su fin y con este resumen dejo por finiquitado el año.

Feliz salida y entrada de año.

martes, 22 de diciembre de 2020

Resumen 2020 III (Julio - Septiembre)

Empezamos el mes de julio con una entrada en la que hablaba de que a pesar de que nos encontrábamos en la parte central del verano, parecía que en Collado Villalba nos hallábamos en pleno invierno. Nada había devuelto un ápice de ilusión a nuestro municipio, pues el Ayuntamiento no había promovido nada para dinamizar mínimamente la actividad de nuestro pueblo. Más bien al contrario, había puesto zancadillas a las pocas iniciativas que se habían planteado, algo que contrastaba con lo que se veía en los pueblos de alrededor, donde sus Ayuntamientos trataban de apoyar a sus empresarios en la desescalada y se iban programando pequeñas actividades bajo importantes controles de seguridad. Recordemos que a principios de julio la situación de la pandemia había mejorado de forma notable y nuestro Ayuntamiento no programó nada hasta casi finales de septiembre teniendo que posponerlo por culpa del mal tiempo y ya entrando de lleno en la segunda ola de la pandemia.

Posteriormente publique el resultado del sondeo sobre lo que los vecinos habían opinado sobre la incorporación de Diana Barrantes al equipo de gobierno municipal y haber dejado a un lado la opción de pactos únicamente conforme al programa presentado por la formación bajo la que se presentó.


Y por lo que quiera que fuese, este año he sentido especial curiosidad por saber que opinaban los villalbinos sobre distintos temas, así que la siguiente entrada fue el resultado del sondeo en el que intente recabar los cambios de hábitos que el confinamiento había provocado.

Y la última entrada del mes de julio fue otro sondeo, si ya sé que he estado muy preguntón este año, pero tenía curiosidad por tratar de plasmar con datos el resultado de algún que otro hilo que había visto en RRSS. Este año ha sido tremendamente duro para el sector de la hostelería y me temo que los próximos no parecen venir con mejores intenciones, al menos en el corto-medio plazo. Y dentro del sector, en nuestro municipio y dada la presencia de dos grandes centros comerciales, tienen gran importancia las franquicias y precisamente sobre ellas os pregunté. Sobre cuales eran vuestras favoritas y cuales os gustaría que se asentaran en Collado Villalba.

Así que de esta forma nos metimos en el mes en el que Villalba se para, por lo que este año no hemos sido de los más perjudicados en este sentido debido al Covid, ya que la nueva normalidad se parecía bastante a la antigua en el mes de agosto. Si me apuran, las ganas de salir a la calle tras el encierro, hacían que muchos quisiesen salir a disfrutar de la misma cuando el sol ya dejaba atrás su implacable acecho. Y precisamente, como fruto de uno de esos paseos nocturnos surgió una entrada en la que reflejé la vida de Collado Villalba en verano cuando el sol se ocultaba. Carreras de coches, corrillos sin mascarilla, cachimbas… En definitiva, un interesante descontrol para estar aún con los rescoldos candentes de la primera ola del covid.

Y tras esto, traté de recuperar un sondeo que ya realicé hace mucho tiempo y del cual perdí los datos por aquello de los alojamientos de Internet. Se trataba de conocer la opinión de los Villalbinos a la hora dehacer la compra. Un factor que también ha cambiado muchísimo a raíz del Estado de Alarma.

Y para finalizar agosto, hice un pequeño repaso a los datos de sanciones que habían publicado algunos ayuntamientos como consecuencia del no uso de mascarilla, botellones o incumplimientos horarios por parte de la hostelería. ¿A que no sabéis que municipio volvía a salir retratado para mal? 

A raíz de la compra de Supersol por parte de Carrefour, llevé a cabo un pequeño repaso a cómo ha cambiado el comercio de alimentación de nuestro municipio en las últimas cuatro décadas. El paso desde la tienda de barrio a las grandes superficies y el cambio de enseñas de algunos de los locales.

Continué con otra entrada dedicada a las pasarelas de Collado Villalba. Recordemos que Villalba es un pueblo con muchos problemas de movilidad como consecuencia de estar cortados por la autopista, las vías del tren y el rio. Y a ello habría que sumar otras travesías importantes de carreteras como la de Navacerrada o Alpedrete. Precisamente el cruce de la primera de ellas es desde un punto de vista de seguridad vial, uno de los puntos negros de Collado Villalba (desgraciadamente no es el único) y de gran dificultad para encontrar una solución. Por cierto, y hablando de pasarelas, seguimos esperando que la concesionaria del hospital pague la de acceso que tenían que haber costeado ellos.

Y cerramos el trimestre con la llegada de la segunda ola de contagios de coronavirus y las consiguientes restricciones de movilidad y asociación que todos ya sabemos. En aquel momento la confusión era total y nos debatíamos entre si lo mejor era el cierre perimetral de todo el municipio, de las zonas básicas de salud y alguna que otra opción más. Y como no, yo en mi línea preguntona, volví a lanzar la pregunta a mis queridos vecinos.

lunes, 14 de diciembre de 2020

Alto voltaje

 Belén de la Plaza de los Belgas
No pensaba escribir sobre el tema de las luces navideñas este año, pues fue tema ya abordado el pasado ejercicio y no quería ser repetitivo, pero el inoperante equipo de gobierno que nos desgobierna obliga a ello.

Vaya por delante, que no comparto muchas opiniones de las que leo en RRSS en torno al tema, empezando por los que ponen a parir las “cordadas” que tiran por las copas de los árboles que, aunque son muy sencillas a mí me gusta el efecto que causan sobre el global de la Calle Real, pues no son demasiado invasivas y por el contrario el “efecto pasillo” que generan me agrada.

Tampoco comparto los que se quejan de que si tal urbanización es de segunda porque no le ponen luces o que dados los impuestos que se pagan, se merecen sus luces. La colocación de las luces de Navidad no son un premio por ser buenos vecinos, sino que son una inversión para la dinamización de la actividad comercial en unas fechas tan señaladas, al menos así lo entiendo yo, por lo que deberían ser criterios comerciales los que marquen la gran mayoría de las ubicaciones de las mismas. La celebración más religiosa de la Navidad obedece a cada persona, que es libre de cantar villancicos, ir a la Misa del Gallo, comer cordero o sentar a un pobre a su mesa por estas fechas.

Por ello el año pasado critiqué la tardía colocación de la iluminación navideña en nuestro municipio pues, aunque entiendo que la factura de la luz subirá notablemente por la colocación de la misma, entiendo que su función es importante en algunas fechas marcadas previas a la Navidad propiamente dicha (Black Friday y puente de la Inmaculada o Constitución). El poner un horario racional durante esas fechas marcadas, aunque luego se apagasen hasta las fechas más próximas a la Navidad con la excepción de los fines de semana, me parece la opción más lógica e interesante. Desconozco si hay dificultades técnicas que dificulten el poder hacerlo así, pero en los tiempos de la digitalización, cuesta creer que no se pueda programar el alumbrado público.

Y es que no es cuestión baladí, pues a las fechas en las que se ha encendido la iluminación en Collado Villalba, la campaña comercial navideña ya ha vendido cerca de un 50% del global de la misma, cifra nada desdeñable cuando hablamos del mayor gasto que realizamos los españoles a lo largo de todo el año. Solo hay que fijarse en como otros municipios han volcado esfuerzos en su programación navideña en los últimos años Málaga, Vigo, Torrejón


Imagen del montaje de Torrejon del año pasado

Así que vamos a lo mollar del asunto. Este año eran muchas las voces que sugerían la desaparición de la iluminación navideña o su moderación por aquello de destinar más recursos a causas sociales. Evidentemente, esa medida nunca iba a encontrar el consenso por aquello de agraviar a unos vecinos u otros si se usaba el criterio de ubicación o si se entraba en una guerra contra el espíritu cristiano de la Navidad. Pero resulta que el consenso que se antojaba imposible ha sido logrado, pero por otro motivo. Reduciendo el número de luces y las ubicaciones de las mismas, han disparado el gasto hasta casi triplicarlo. Lo que viene siendo hacer un pan como unas hostias.

Resulta que se gastan un dineral que no tenemos y que tan preciado es para otros menesteres en estos momentos, y dejan sin luces rotondas que habían decorado otros años y calles tan emblemáticas como la Avenida Juan Carlos I.

Detalle del belén de Los Belgas

Nos van a querer vender humo con el belén que han montado en La Plaza de los Belgas, pero que alguien me corrija, pero creo que algunos elementos del mismo ya estuvieron colocados en algunas rotondas en otros años. Y aunque no fuese así, no compensa el gasto extra ni el abandono de las rotondas, que son puerta de entrada de nuestro municipio.

Y sale el concejal del ramo y dice que también se ha triplicado el gasto en cultura, lo cual estaría bien si ese gasto repercutiese en el acceso a la misma de todo el municipio, pero dado el hándicap de nuestro obsoleto teatro municipal, no hace más que ponernos en alerta sobre contratos sospechosos o poco claros, pues resulta que la obra de teatro más costosa viene por la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid y no por vía municipal. Así que lo dicho, muchas explicaciones tendrá que dar el señor concejal para tan gran desatino y más cuando tiene tantos contactos en el mundillo de la cultura, no vaya a ser que en lugar de venir a servir a la cultura de nuestro municipio, se vaya a servir de nuestro municipio para contentar amigos y obtener recíprocos servicios. Esto son solo conjeturas mías, pero visto el pelaje de la política local, no me digan que no da que pensar. Y mira que este concejal era de los que había levantado más y mejores expectativas por su curriculum.