miércoles, 7 de septiembre de 2011

Panoramix

Pues a pesar de que hace ya varias semanas de la última tormenta, las aguas bajan algo más que turbias por Collado Villalba. Y no me refiero a las del Guadarrama, que sigue adoleciendo de una buena limpieza la cual convendría que se llevase a cabo antes de llegar las épocas de lluvia o tal vez habrá que dejar que se instaure en él un nuevo ecosistema en el que junto a los patos, los cuales no termino de entender como han decidido instalarse en el mismo, se junten otro tipo de animales “menos simpáticos” bien alimentados en parte por la poca educación cívica de los Homo Erectus que campan por algunas zonas como el Parque de las Bombas.


A finales de la semana pasada se comenzó a hablar de unas importantes medidas de recorte para afrontar la difícil situación económica de nuestro municipio. Nada que debiese sorprendernos a estas alturas, por cuanto estaba claro que algo había que hacer. El asunto principal estaba en saber el que y el cómo. Y ahí estaba la principal novedad, por primera vez se hablaba de recortes en la plantilla del funcionariado municipal, algo que en campaña negó de forma insistente el por aquel entonces candidato Agustín Juárez, como parte de su receta mágica para conseguir enjugar la deuda de las arcas municipales.

La guerra de cifras ha sido tal que ahora no se cual es la cierta, si son 100 los empleados, si son un 20% de la plantilla o si son un 20% de la plantilla eventual que no se le renovará el contrato (con lo cual no hablaríamos de despidos). Sea como sea, lo que está claro es que esta vez le ha tocado a los que hasta hace poco se consideraban el sector “intocable”, el funcionariado público. Y créanme si les digo que algunos con el corazón creían que eso nunca llegaría, pero con la cabeza ya veían las sombras acercarse desde hace meses independientemente de quien saliera en las elecciones elegido. Y es que está claro que si nos fijamos en los países mas acuciados por la crisis, todos tienen algunos rasgos comunes (burbuja inmobiliaria asociada a la crisis crediticia y un funcionariado sobredimensionado) y por ende, está claro que la receta para salir de la crisis va a llevar incluida un poco de “yogur griego”, es decir reducción del sector público de forma urgente.

Pero como eso es un tema que desborda el ámbito de este blog y no quiero ganarme más enemistades, porque uno tiene amigos funcionarios, vamos a seguir con lo que al tema local se refiere.

La medida estrella era la anteriormente citada a la que acompañaran otras como las reducciones del 20% en contratos de recogida de basuras y demás empresas de servicios. Con lo cual nos olvidaremos por ejemplo de ver en funcionamiento esos contenedores soterrados que ya vimos probar a la concejala Joanna Bielika (perdón si he escrito mal el nombre) hace cinco años y que su sucesor no consiguió poner en uso.

También se reducirá en un 50% el gasto en publicidad. Partida en la que creo que se podrían haber ahorrado bastante más, ya que por ejemplo resulta absurdo gastarse miles de euros en campañas como el recordatorio de ser educado a la hora de tirar la basura y tener los parques limpios. Además, que no se nos olvide, que existe una radio de carácter público a nivel municipal, que me imagino que su principal misión será la de dar servicio público, sobretodo información, a los vecinos del municipio.

Con esas medidas y las ya anunciadas, se espera que el consistorio se llegue a ahorrar la cifra de 8.5 millones de euros anuales y alcanzar el equilibrio presupuestario de aquí a dos años.

En definitiva, Agustín Juárez no es el druida Panoramix que tiene la poción mágica que aseguraba tener en campaña para salir de la crisis, ni es el rey Midas que convierte en oro todo a su paso. Algo que ya sospechábamos y que no hace más que poner de manifiesto, que no hay una receta mágica y que los ajustes para salir de la crisis van a ser más que duros y que no serán muy diferentes según el color del partido que gobierne, si acaso cambiará el “timing” y unos apuraran más que otros para llevarlos a cabo y ya se sabe que quien apura… se acaba quemando.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Menuda papeleta la de Agustín. Un pufo de 20.000 millones de pesetas y el culpable de este despilfarro todavía se pone chulo. Está visto que no conoce la vergüenza.

http://ecodiario.eleconomista.es/espana/noticias/3357125/09/11/CEl-ex-alcalde-del-PSOE-acusa-al-regidor-del-PP-de-mentir-para-despedir-a-100-trabajadores-municipales.html