viernes, 22 de octubre de 2010

Para la libertad...

Es cuanto menos curioso, que un pueblo que apenas carece de una identidad propia en cuanto a edificios emblemáticos, no digamos ya de patrimonio histórico-artístico, se permitiese el lujo de perder uno de los pocos lugares singulares que tenia. Me refiero al monumento en homenaje a los caídos.


No es que esté haciendo apología del franquismo, sino que me ha resultado curiosa la evolución del lugar. Para los que no lo recuerden, lo cual no es nada difícil ya que por su ubicación se pasaba delante suyo pero no se caía en su cuenta o se ignoraba su existencia, el citado espacio estaba en anexo a las antiguas instalaciones de la Cruz Roja. El Monumento consistía en una pared de losa granítica, en la cual estaba fijada una cruz de hierro y una figura a tamaño real de una mujer sujetando una paloma si mal no recuerdo con las típicas inscripciones de “en memoria de….”. Curiosamente, mis primeros recuerdos de mi mas tierna infancia se corresponden con ver pasar el cortejo funebre del Caudillo justo desde ese mismo lugar cuando apenas contaba con tres años.

Al citado lugar, primero se le quitaron las inscripciones y posteriormente la figura de la mujer, para quedar lo que queda actualmente, la pared y la cruz. Ahora mismo, el recinto se encuentra vallado y no sé qué es lo que se piensa hacer en el, ya que probablemente le toque de refilón la reforma del barrio de Pradillo Herrero.

Seguramente, para la mayoría de los villalbinos lo que se haga mejorara lo existente, aunque los nostálgicos que cada 20N en su peregrinaje hacia el Valle de los Caídos siguen haciendo su parada en el lugar, lo que se encuentren no les gustara nada, ya que no podrán hacer su típica ofrenda floral.

Pero a lo que iba, en un pueblo tan falto de lugares con encanto y en el que se han creado un sinfín de parques de dudoso gusto estético, se han decorado rotondas con un costo elevadísimo o se ha levantado un esperpento como el “Vigía del Collado”, ¿no habría sido más del gusto de todos los vecinos el haber renombrado el lugar como un homenaje a las libertades o algo similar? Teniendo en cuenta que se encuentra a menos de un kilometro de donde Antonio Molina perdió su vida en acto de servicio no habría estado de mas.

La imagen que ilustra esta entrada corresponde a la estatua de la libertad de la ciudad de Budapest.

2 comentarios:

Villalbino dijo...

Hola,te cuento,que con anterioridad a la construcción de la autopista,existía el monumento original a los caídos,no lo recuerdo muy bien,pero en la retina me quedan las imágines de unas escaleras y grandes cadenas a ambos lados,supongo que culminaban con una figura o algo al término de los peldaños.Sería bueno aportar fotos si alguien dispone de ellas.

Saludos.

cronicas villalbinas dijo...

Villalbino, gracias por aportar tus conocimientos.

Por edad o por mi falta de memoria, solo alcanzo a recordar la figura de la mujer y la cruz.