Dicho recorte me ha hecho recordar aquel primitivo periódico
“Sierra” que era la principal cabecera local por aquellos tiempos y del que los
chavales estábamos ávidos por hacernos con un ejemplar con la crónica del
basket. Luego llegaron “El Faro del Guadarrama” y “El Telégrafo”. No descarto
que El Faro fuese anterior, pero si recuerdo que me resultaba más fácil hacerme
con un ejemplar del primero.
Lo que no recuerdo, es si dicho periódico lo conseguíamos en
el famoso puesto de Chani o en otro lugar, pues si recuerdo pillar una
publicación en tamaño a5 en el que se recogían todos los marcadores semanales
de todas las disciplinas con representación en el pueblo por aquellos remotos
años.
Pero volviendo al recorte, y más concretamente a las
ofertas, lo primero que me impacta es leer marcas que eran importantes en su
momento y que hoy ya no existen (La Campana de Elgorriaga), otras rebautizadas
como Molico, hoy bajo el nombre Sveltesse. Productos casi imposibles de
encontrar hoy en los lineales como el Ajax polvo o el aceite Elosua, por no
hablar del aceite de oliva de 0.8º que ha sido eliminado pasando los aceites
refinados a 0,4º y 1º.
El segundo impacto viene de ver los precios en nuestra
añorada peseta. Esa moneda que dejamos hace poco y en la cual hemos seguido
haciendo cálculos durante un largo tiempo. Y claro está, con los tiempos de
inflación desbocada, surge irremediablemente el deseo de comparar precios y ver
cómo ha subido la cesta de la compra.
Pero si hacemos ese ejercicio, lo primero que hay que tener
en cuenta, es que estamos hablando de los tiempos en los que aún no habían
irrumpido las cadenas de supermercados de gran descuento. A groso modo la
competencia de Aljoma podía ser el Compre Bien y no sé si por esas fechas ya
estaría funcionando Gigante. A Pryca aún le quedaban unos cuantos años hasta
llegar al pueblo, concretamente finales del año 93.
Así pues, con estos condicionantes casi ningún artículo es
válido para hacer ese ejercicio de comparación, aunque alguno si se puede.
Pero pongamos el marco en su sitio con unos datos curiosos
El famoso IPC ha subido en este tiempo la friolera de un
274,4% si tomamos el valor del mes de septiembre
El salario mínimo en España rondaba las 37.170 pesetas de la
época, lo que al cambio serían 223,4€ sin contar inflación. Si corregimos con
el IPC se nos quedaría en 81,53€.
Si miramos el salario medio, se situaba en 1.405.100 pesetas
brutas anuales, 8444,82€. Una cifra muy distinta a los 24009,12€ que se estiman
como salario medio para este 2022. Esta diferencia viene a ser de un 284,30%,
casi un 10% más de subida salarial que de inflación, es decir de ganancia de
calidad de vida.
Pero a uno le da la sensación de que algo no cuadra. Me parece que los repartos de ese nivel de vida no son lineales y que los ricos son más ricos y no que los pobres sean más pobres, pero sí que la clase media es cada vez más pequeña. La pobreza es otra cosa distinta al concepto que tan alegremente usan algunos partidos políticos y medios de comunicación. Y que este paradigma se ha acusado en el transcurso de las crisis de este nuevo milenio (y no porque las últimas décadas del anterior siglo no tuviesen las suyas). Clara muestra de lo que digo es que el sueldo más común se encuentra entre los 12000 y 21000 euros anuales. Siempre hablando de importes brutos.
Y aquí os dejo un resumen de cómo han evolucionado los precios de los artículos que he podido chequear. ¿Qué os parecen estos datos?
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