Constantino, el lado oscuro de la fuerza, los buitres y Los Negrales

Hoy me he levantado con una triste noticia, la muerte de Constantino Romero, el actor de doblaje, teatro, locutor radiofónico y presentador de televisión.

Para muchos de nosotros Constantino forma parte de nuestros recuerdos. Crecimos con el apasionante concurso de El Tiempo es Oro o el 3x4. Y es que como desligar su voz de Clint Eastwood, Sean Connery, Roger Moore, Arnold Schwarzenegger o personajes como Darth Vader, Mufasa y tantos y tantos otros.

Pero el día era brillante y luminoso y apetecía dar una vuelta a la dehesa aunque fuese a trote cochinero como ha sido el caso de hoy. Presenciar el contraste de colores del verde del pasto con el azul del cielo son cosas que no tienen precio y especialmente cuando sobre uno sobrevuelan un numeroso grupo de buitres que han ido bajando poco a poco para enseñarnos su majestuosidad.

Algunos ejemplares han estado dando vueltas en torno a la torre de los bomberos como si fuesen a bajar allí mismo, pero por allí no estaba lo que ellos querían. Tal vez solo haya sido un ataque de curiosidad por ver lo que estaba leyendo el bombero que tantas veces sale al banco que hay justo en la puerta del puesto de nuestra localidad.

O tal vez fuese el olor al cadáver del polideportivo de la Mancomunidad de Los Negrales para cuya defensa estaban recogiendo firmas justo a la puerta de la Ciudad Deportiva donde en esos momentos el CUC Villalba se jugaba el liderato del grupo para tratar de lograr ese ascenso a 2ª división B.

Y es que el enclave de Los Negrales es como esa tierra de nadie donde Harry el Sucio tuvo tantas y tantas aventuras. Su ubicación provoca que sus vecinos vean como son el pariente pobre a la hora de recibir servicios básicos teniéndose que desplazar hasta los centros de los respectivos pueblos que se los prestan en función de la parte del barrio a la que pertenezcan. Me temo que ahí los vecinos a los que les corresponde Alpedrete lo tienen un poco más complicado aún si cabe que a los que les toca Collado Villalba.

Con la desaparición de la Mancomunidad, empezará una situación complicada en el barrio, ya que para unas cosas será mejor ser de un pueblo y para otras del otro y así un montón de cosas, aunque la más probable es que solamente se acuerden de ellos una vez cada cuatro años, ya que si eso ocurre con todos los ciudadanos de a pie, ya me dirán ustedes con los que viven entre dos tierras.

Se argumentan razones puramente económicas para la disolución de la mancomunidad y la venta del polideportivo y no vamos a negar que 66000€, que es lo que dicen los respectivos ayuntamientos que cuesta el tinglado no es una pasta con la que está cayendo. Pero como siempre, hay que hacer lectura de las cifras y ver los contextos.

Cierto es que ya no estamos en la época en la que como decía José Pablo González, la inversión en cultura y entendemos que también en deporte, no se podía cuantificar por aquello de que era un bien intangible y que esa inversión daba importantísimos frutos en cosas que no se pueden plasmar en números ni papeles. Pero aunque ya no estemos para tirarlo (creo que nunca lo estuvimos ni se debe estar para ello), la realidad es que la inversión en deporte es la mejor inversión en salud, planes antidroga, inserción social y tantas y tantas cosas. Y eso son funciones que el polideportivo de Los Negrales está cumpliendo y si no lo hace más, es como en tantas y tantas ocasiones, por la torpeza de los gerentes de nuestros municipios.

Con esta decisión, nuestro Ayuntamiento vuelve a ser pionero en algo tras el famoso ERE ejecutado el año pasado. Y es que creo que no hay precedentes de venta de un patrimonio público en uso como es el polideportivo de Los Negrales en nuestro país. Y como repito, el desembolso que efectúan los ayuntamientos en él es importante, pero a todos nos gustaría que se llevasen a cabo otros recortes antes que ese. Y no olvidemos que queda la parte más importante y más jugosa del asunto. ¿Hay comprador para el polideportivo? ¿A qué precio?

 Los apuros por los que pasamos exigen de recortes mayores y decisiones más valientes que la venta del polideportivo. ¿Qué tal la supresión de los cargos de confianza?

Esa decisión sí que sería pionera y aplaudida por todos, salvo por los pocos privilegiados que ostentan tan altos cargos. En algunos casos sin que se les conozcan mayores méritos que el servicio al partido de turno.

Pero está claro, la política es como el lado oscuro de la fuerza y cuando les atrapa no hay manera de que las personas vuelvan a estar al servicio de la comunidad por encima del suyo propio.

Si quieres apoyar la petición para evitar el cierre del polideportivo, firma aqui. Que esto no sea un "Sayonara Baby"