Adan Martinez |
Al final no hubo sorpresa y Mariola fue elegida sin ningún
problema como alcaldesa ya que no había otra solución posible en la ecuación
salvo pacto de resto de fuerzas políticas, lo que supondría un harakiri político
para Vox y que sabe dios a que situación de bloqueo nos habría llevado. Así
pues, fue investida con los votos a favor de su propio grupo mientras que el
candidato del PSOE se vio respaldado por Mas Madrid además de sus propios
concejales frente a los votos a sí mismos de Vox y MCV.
Esta placida proclamación de Mariola como alcaldesa
contrastará con el día a día de los plenos y la vertiente más legislativa y
ejecutiva del Ayuntamiento, pues no deja de ser un gobierno en minoría y tendrá
que ir buscando apoyos puntuales pleno a pleno para ir sacando todos los temas
durante los próximos cuatro años.
Y la cosa empezará fuerte, pues hay temas muy importantes
que ya le pudieron costar el puesto a Mariola como la obra parada del pabellón
o la “crisis de los semáforos”, agravada unos días después de las elecciones
con la avería de otro grupo en la misma Calle Real, a mi juicio bastante más
peligroso por la falta de visibilidad cuando se cruza desde la antigua policía
municipal hacia Ibercaja (antiguo Kapy para los nostálgicos).
Pero hoy me voy a parar en los repartos de responsabilidades
de los nuevos concejales, pues ha habido un importante reajuste de tareas a
raíz de la desaparición de los naranjas de Ciudadanos.
Estela Mosquera |
Se avecina un mes de julio más que interesante entre unas cosas y otras, pero antes hay pleno este próximo jueves donde a buen seguro habrá noticias jugosas. Estaremos pendientes.