Durante el pasado mes de octubre, de un plumazo nos quedamos sin dos medios de comunicación en la comarca. La crisis económica se llevaba de
un plumazo al joven Deporte Sierra y al decano El Faro del Guadarrama, aunque
este aún continúe tímidamente su singladura por internet.
Nos quedábamos prácticamente sin ninguna referencia
informativa en soporte de papel, algo que dificulta muchísimo el acceso a la
información, especialmente a determinados colectivos como el de las personas
mayores que no saben usar las nuevas tecnologías. Pero también facilita el
acceso a determinadas informaciones incluso a los que pasamos demasiado tiempo
delante de la pantalla de un ordenador. Y es que la información que recibimos vía
internet viene ya muy filtrada en muchos casos.
Solemos dar erróneamente total credibilidad a lo que ponen nuestros
conocidos en Facebook e ignoramos que si tenemos un montón de noticias en una
misma línea editorial, no significa necesariamente que esa noticia sea
totalmente veraz, pues en muchos casos la procedencia es la misma fuente por el
fenómeno de la viralidad y dependiendo del medio, puede o no estar contrastada.
Una mentira, falsedad o noticia no contrastada, no se convierte en la verdad
absoluta por alcanzar 10000 me gusta o haberse retwitteado 5000 veces.
¿No recuerdan cuando al tomar el tren o al ir a la consulta
del médico tenían como rutina el agenciarse un ejemplar del diario gratuito de
turno para amenizar la espera? ¿Cómo iban los trenes llenos de gente con la
mirada fija en el periódico y aquellos que no habían logrado uno, se volvían bizcos
tratando de alcanzar a leer la noticia del periódico del vecino? No era como
cuando uno trataba de leer la crónica del partido del domingo en el Marca del
lunes del compañero de viaje, pero casi.
En definitiva, nos hemos ido quedando sin una parte muy
importante de la información, aquella que nos llegaba sin nosotros buscarla,
aquella que llegaba en su estado más puro. Por ello, el recibir esta semana la
noticia del nacimiento de un nuevo medio escrito mensual de ámbito comarcal, no
puede ser más que un motivo de alegría. Alegría por tener un poco más de
información, alegría por el nuevo trabajo de la gente que van a hacerlo posible
(a alguna la conozco personalmente) y alegría por ofrecer un pequeño rayo de
esperanza de que tal vez las cosas puedan cambiar.
Sobre la calidad del mensual, lo mejor es que lo averigüen
ustedes mismos, pero pinta bien, pues hay temas tratados con amplitud (no como
en otros periódicos donde se paga una nota de prensa a precio de anuncio a página
completa y no se da información), entrevistas y mucha información de la
comarca.
Además un plus adicional, como no podía ser de otra manera
en los tiempos que corren, también tienen edición digital, desde donde poder
descargarse la versión de papel, para aquellos que como yo, rara vez logran o lograban
hacerse con un ejemplar por no poder pasar por los puntos de distribución de
los mismos o por pasar demasiado tarde por los mismo.
Seguiremos atentos a todo lo que nos cuenten desde “Aquí en la Sierra", esperando que sean muchas más las buenas que las malas noticias que nos cuenten y deseándoles una larga vida.
Sin duda una excelente noticia. Mucho ánimo a los valientes!
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