Espero que nadie haya pensado que he abandonado mi tarea en este blog, lo que pasa es que estoy mas liado que la pata un romano. Y es que este año estoy colaborando en ese proyecto que es la Tragamillas. Una carrera que comenzó por la iniciativa de un pequeño grupo de corredores que quedaban todas las semanas en la dehesa a darse un par de vueltecitas.
Cierto es que los lideres del proyecto no cabalgan solos en este invento, sino que están arropados por un montón de gente clientes habituales de sus negocios en los bares Mesón Castillo y Las Murallas. Y es que siempre tienen un guiño con los clientes, a los que rápidamente convierten en alguien de su entorno y ya quedas atrapado y con las zapatillas para salir a correr.
El caso es que el proyecto en su segundo año, no solo podemos afirmar que goza de buena salud, sino que crece fuerte y robusto. El año pasado la puesta en marcha fue dura, ya que ir pidiendo apoyo para algo que la gente no conoce es realmente difícil. Este año ese punto pensábamos que estaba superado, pero el aumento de corredores hace que tus necesidades se disparen y el entorno económico no hace falta que os lo describa, que cada uno lo sufre en sus carnes no facilita la labor. Sin embargo, los buenos resultados del año anterior en cuanto a la critica de los atletas y la calidad organizativa, han resultado ser un magnifico aval a la hora de recaudar ayudas. De esta manera, hemos conseguido que hayan sido muy pocos los patrocinadores que se han caído del cartel y lejos de eso, este ha crecido.
Y es que la carrera se ha convertido en un referente del deporte en la sierra. Atrás han quedado los años en los que los villalbinos teníamos que mirar con envidia sana las carreras que se organizan en Guadarrama, Moralzarzal o Cercedilla, auspiciadas por organizaciones profesionales. Ya tenemos una gran carrera y además hecha por gente de aquí y para los de aquí, como bien demuestra la altísima cantidad de inscritos no solo de Villalba, sino de otros pueblos de la Sierra, compañeros de fatigas por esas cañadas en los largos entrenamientos. Así pues, muchos son los atletas del Samburiel de Cerceda, del nuevo Guadarrama Togasa o del A. D. San Lorenzo, entre otros.
Pero el que la carrera tenga una alta participación entre los atletas locales no quiere decir que no vengan gentes de otros lugares, no solo de Madrid (corredor del Henares y zona centro principalmente), sino que también vendrán de pueblos limítrofes a la comunidad, en especial de las provincias de Toledo, Segovia, Guadalajara o Salamanca. Y es que para algunos es una forma distinta de hacer turismo o disfrutar de su ocio. Sin ir mas lejos, un conocido me ha comentado hoy, que un amigo suyo correrá la prueba y es muy posible que se plante ya el mismo viernes en Villalba con su autocaravana, disfrutando de un fin de semana en familia.
Pero rizando el rizo, la participación este año ha ampliado su radio de acción y de esta manera las fronteras no están ya en Zamora, sino que llegan por el norte hasta Girona o Pamplona y por el sur hasta Jaén o Murcia. Por no hablar de extranjeros de paso por España, que van a aprovechar su estancia en la capital para correr la prueba, como el caso de una joven atleta júnior, o las inscripciones de gente que viene desde Milán o Alemania.
En definitiva, esta claro que el atletismo esta de moda y que nuestra media se esta haciendo un hueco en el duro calendario de las medias de Madrid, donde es raro el fin de semana en el que no se celebra una o mas.
Actualización 2-03-08
enlace con la clasificación http://castillovillalba.webcindario.com/clasificaciones/GENERAL2008.pdf
Y mañana crónica.
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miércoles, 27 de febrero de 2008
domingo, 10 de febrero de 2008
Tora, tora, tora...
Llevaba tiempo sin actualizar el blog y no era por falta de material, sino mas bien por falta de tiempo, porque hay ciertas tareas en las que me he embarcado que absorber buena parte de mi tiempo libre y apenas me dejan tiempo para poder ponerme al día de lo que pasa en Villalba a través de los distintos blogs y foros. Por cierto, ciudadan@s, te debo una colaboración y ahora mas que nunca, que la manita que me has echado ha sido muy importante.
Pero como no quiero que este artículo quede en una sucesión de banalidades y loas varias, vamos al grano, a seguir dando leña al mono a ver si se enteran algunos.
Se ha hablado mucho a lo largo de los últimos meses sobre las actuaciones de las distintas variedades de policía local a la hora de sancionar las infracciones circulatorias y de estacionamiento. Y si no han tomado cartas en el asunto en las calles epicentro de las críticas, pues la cosa no mejora. Así en la Avenida Juan Carlos I, parece que lo importante es que no se aparque en horario comercial, eso si, fuera de este no hay problema en que los usuarios del bingo nos hagan tener que invadir el carril contrario por sus permanentes dobles filas.
Pero hay algo que aún me preocupa más, y esto es que hay una total permisividad en el aparcamiento sobre las esquinas de las aceras, lo que hace que tengamos que arriesgarnos como auténticos camicaces a la hora de incorporarnos a la citada vía. Un buen ejemplo lo tenéis en la esquina de la recién estrenada calle que dará salida a los vehículos del barrio vaticano a la altura de la nueva Escuela Municipal de Música. Su pronunciada cuesta hace que sea imprescindible invadir el paso de peatones para poder salir de la misa, pero aún así, siempre hay un coche “haciendo la gracia”. Consecuencia, a jugarse el bigote.
Pero como no quiero que este artículo quede en una sucesión de banalidades y loas varias, vamos al grano, a seguir dando leña al mono a ver si se enteran algunos.
Se ha hablado mucho a lo largo de los últimos meses sobre las actuaciones de las distintas variedades de policía local a la hora de sancionar las infracciones circulatorias y de estacionamiento. Y si no han tomado cartas en el asunto en las calles epicentro de las críticas, pues la cosa no mejora. Así en la Avenida Juan Carlos I, parece que lo importante es que no se aparque en horario comercial, eso si, fuera de este no hay problema en que los usuarios del bingo nos hagan tener que invadir el carril contrario por sus permanentes dobles filas.
Pero hay algo que aún me preocupa más, y esto es que hay una total permisividad en el aparcamiento sobre las esquinas de las aceras, lo que hace que tengamos que arriesgarnos como auténticos camicaces a la hora de incorporarnos a la citada vía. Un buen ejemplo lo tenéis en la esquina de la recién estrenada calle que dará salida a los vehículos del barrio vaticano a la altura de la nueva Escuela Municipal de Música. Su pronunciada cuesta hace que sea imprescindible invadir el paso de peatones para poder salir de la misa, pero aún así, siempre hay un coche “haciendo la gracia”. Consecuencia, a jugarse el bigote.
Por cierto, tras los premios naranja y limon de El Faro, el próximo día 15 cerraré las votaciones a mis premios "Cerro" y "Vigía". Recordaros que podeis votar aquí.