Pasado el día de la cita, toca hacer balance de la IV edición de la Tragamillas, la Media Maratón de Collado Villalba. La verdad es que me resulta complicado hacer un análisis de la misma, ya que la conozco con bastante profundidad y podría ponerle más de uno y de dos defectos a una carrera que en líneas generales todos los que la corren la califican de casi perfecta.
Sin duda alguna, esta Tragamillas empezó a forjarse bajo algo demasiado peligroso como era el exceso de euforia producido por el éxito de la edición del 2009 y es que el éxito es algo que suele tener una digestión muy complicada. Ya en la edición pasada existía una fuerte crisis que conseguimos esquivar, pero lo del presente año ha sido mucho más complicado de evitar y en algún momento la carrera ha tenido su pequeña o gran crisis. Afortunadamente, la respuesta de las inscripciones y la aparición de algún nuevo sponsor nos han permitido salir adelante con el proyecto pese a los problemas de financiación a los que no ha sido ajena la organización de la prueba.
Como todos los años, entre finales de marzo y primeros de abril se cierra la edición del año en curso con la preparación de los datos y cerrando los flecos que pudiesen existir con las empresas colaboradoras así como ayuntamiento. En el caso de este último con la reunión en la que se sacan las conclusiones de todo lo que es trabajo en común para el desarrollo de la carrera. Es muy importante el hacerla cuando todo está fresco aún, ya que de esta manera los pequeños fallos no caen en el saco del olvido.
Ya con vistas a finales de verano o septiembre, se comienza a trabajar en la edición del año siguiente con la confección del dossier de presentación y la captación de recursos para la misma. Es una tarea dura, lenta y desagradecida, ya que las respuestas se van demorando y entorpecen el trabajo del grupo que se va aplazando con los por si acaso hasta que ya “hay que tirar con lo que haya”.
Una vez que todo esto se ha producido, entra la fase dos, la publicitación del evento. Algo que los primeros años fue muy duro, pero que en esta edición ha resultado mucho menos laborioso gracias al nombre que hemos conseguido hacer para la prueba y a trabajos que nos han servido de un año para otro como buena parte de los contenidos de la pagina web, que aunque ha habido que adaptarlos no era partir de cero.
Una vez que la carrera esta publicitada o más bien, solapándose con esta tarea, comienza el proceso de inscripción, donde también existe una importante carga de trabajo, si bien internet ha ayudado bastante en esta labor, ya que son los propios corredores los que aportan sus datos a las bases del cronometraje (evitando errores) además de darles todas las facilidades del mundo evitando desplazamientos.
Paralelamente se va trabajando con los distintos departamentos del ayuntamiento para coordinar los trabajos que se han de desarrollar con vistas a la carrera. Hay que tener en cuenta que hay que movilizar mucho personal y medios. Plantilla del polideportivo, cuadrilla de mantenimiento, policía municipal, etc. Y aquí se suma una de las grandes bazas a favor con las que cuenta nuestra carrera, la gran aportación de voluntarios que pone la organización con vistas a que todo salga bien. Es muy difícil poder ver una carrera por importante que sea donde exista un mayor despliegue que en la nuestra y de forma desinteresada.
Las dos últimas semanas son de un ajetreo insufrible tratando de atar todos los cabos sueltos como la preparación de las carpas, distribución al detalle de todo el personal, cerrar las inscripciones, rueda de prensa, etc.
Pero sin duda alguna lo más gordo viene en las dos últimas jornadas con la preparación de las bolsas del corredor, marcado del recorrido e indicación de los puntos kilométricos, acotamiento de la zona de meta, señalización de los distintos servicios de la carrera, entrega de dorsales y chips, resolución de las posibles incidencias que se hubiesen dado en las inscripciones, etc.
En definitiva, hasta llegar al resultado final que la gente ve durante unas horas, la cantidad de trabajo previa ha sido ingente y el personal movilizado de forma altruista muy importante, pero cuando uno ve por los foros los comentarios positivos de la gente da por buenos todos los sacrificios realizados en los meses previos.
Próximamente crónica de lo que ha sido la Tragamillas 2010
Mi enhorabuena por la organización, no la había corrido y me pareció muy buena, ánimo.
ResponderEliminarPuestos a proponer mejoras para 2011, que los primeros kilómetros sean con algo más de anchura, para evitar tapones, y que en la bolsa del corredor haya alguna bebida isotónica.
Mucho ánimo y a seguir así
En primer lugar me alegra mucho que te gustase la carrera.
ResponderEliminarRespecto al recorrido, decirte que es casi imposible encontrar uno que mejore el actual, que es el tercero que presento la organización tras las dos primeras ediciones. Cierto es que los dos primeros kilometros discurren por lugares un tanto angostos, pero otro tipo de recorrido nos llevaria a los problemas del segundo año, esto es, pasar por las zonas con mas circulación de trafico con la carrera rota, generando molestias a los conductores y situaciones de peligro para los corredores.
Respecto a lo de la bebida isotónica, todo lo resume una palabra "CRISIS". El año pasado pudimos dar agua, isotónicas, cervezas, etc... este año las cosas han sido mas duras incluso de lo que puedan parecer tras ver el resultado de la carrera.