Llevaba un tiempo dándole vueltas a como actualizar el blog
y de pronto recordé que tenia aparcada desde hace tiempo una entrada para una
serie que inicie ya hace algún tiempo sobre personajes destacados de la
sociedad villalbina o que hayan tenido que ver de forma directa con nuestro
pueblo.
Dentro del apartado de “personajes”, nos volvemos a asomar
al mundo de las artes escénicas para hacerle un hueco a Carlos Iglesias. Actor
muy conocido por personajes como el de Benito en Manos a la Obra. Carlos
Iglesias es vecino de nuestro municipio y seguro que muchos de vosotros lo habréis
visto en la calle en alguna ocasión.
Nacido el 15 de julio de 1955 en Quintanar de la Orden, sus
padres emigraron a Suiza y allí viviría hasta cumplir los trece años. Sin duda
alguna este hecho de su vida va a condicionar posteriormente su carrera.
Su llegada al mundo de la actuación profesional le llega de forma un tanto fortuita al tener
que sustituir a un compañero en un grupo de teatro independiente, lo que le
motivo a terminar estudiando en la Real Academia de Arte Dramático.
Con apariciones episódicas televisivas en obras como la
Forja de un Rebelde, Goya o incluso el programa infantil Los Mundos de Yupi que
se alternaron con otros títulos que no cuajaron, su carrera se catapultó cuando
se cruzó en su camino Pepe Navarro, el cual creó el personaje de Pepelu para
Esta Noche Cruzamos el Mississippi, si bien antes ya había colaborado con otros
programas del polémico presentador.
Carlos al ver el encasillamiento que estaba sufriendo por
culpa de un personaje que estaba devorando al actor, decide desligarse del
presentador cuando este está en plena cima del éxito y se pone a las ordenes de
Vicente Escrivá para participar en “Este es mi barrio”, una gran producción de
Antena 3, que no obtuvo el respaldo que la cadena esperaba y a la cual hubo que
finiquitar de forma precipitada.
Sin embargo de aquel trabajo llegó el germen de lo que sería
su mayor éxito interpretativo o al menos el que le hizo ya famoso de forma
masiva, ya que se le ofreció ser el personaje protagonista de “Manos a la Obra”.
Una comedia costumbrista que ya resultaba un tanto fuera de momento cuando se
emitió por primera vez, pero que tuvo una inusitada aceptación que propició
cuatro temporadas de emisión, algo que en la televisión de hoy en día es casi
impensable.
La imagen del ñapas vago tan arraigado en nuestro país parece
ser que hizo que muchos la sintieran como muy próxima y le reportó su mayor éxito
hasta la fecha y seguramente que unos buenos dineros que le han permitido a
partir de entonces hacer proyectos mucho más interesantes aunque mucho menos
comerciales.
Así, pudo retomar una carrera de personajes más complejos y más
ricos como los que interpreto en el teatro, que quedaron relegados por su presencia televisiva, si bien es cierto
que su carrera teatral tienen títulos tan importantes como “Arte”, entre otros
muchos.
Pero los últimos años de su carrera están siendo
protagonizados por su vertiente de director de cine, donde ha logrado una
independencia notable para poder hacer lo que verdaderamente él quiere, si bien
es cierto, que tal vez no es lo que el espectador demanda y más en los últimos
tiempos.
Y es que aquí es donde más entra en acción su pasado como
hijo de emigrantes, una constante en varios de sus títulos, hasta el punto de
haber realizado una trilogía sobre la vida de los emigrantes españoles durante
y después de la guerra. Si, ese tema “tan novedoso y tan original” en el cine
español y que tan buenos réditos de imagen le está dando entre los aficionados
al séptimo arte que cada vez ven menos cine patrio.
Evidentemente este es un tema que a Carlos le motiva y le
inspira, pero el espectador se ha ido alejando de un cine que le resulta
repetitivo y que ha suscitado demasiadas polémicas más allá de la pantalla
grande. Por ello esperamos que cuando cierre la trilogía que configuran “Un
Franco, 14 Pesetas”, “Ispansi” y “2 Francos, 40 Pesetas”, el director acometa
nuevos retos, algo que como hemos visto en este pequeño repaso biográfico, se
ajusta a su carrera inconformista.